Bronca ronca
En estas tierras se llama cultura nacional
al capricho de una clase
que se limita a copiar con tristeza y mal gusto
a la llamada y mal pronunciada cultura universal.
Esta crema nauseabunda no se limita
a mantener su riqueza ilegitima.
Su verdadera intención es matar
cualquier signo de amor que el pueblo da.
No podemos contemplar, ¿cuánta sangre y cuánta más?
Nuestro tiempo no perdona las heridas.
Ya no hay ganas de llorar
ni de callarse y soportar.
Las mentiras ya no sirven en tus días.
Y esto quiere más, no puede parar
la risa cubre sus caras: una gran careta.
Que no transpira a la vista
pero al fin de la lista todo empezará a resquebrajar
Y poco a poco tus penas, son las de muchos que esperan
saciar la sed en un sistema sin agua.
