
Fiebre impar del horizonte
Fiebre impar del horizonte
voy a desatar mi suerte.
Llevo el pulso de un delirio azul.
Sé la historia de aquel hombre
que amarró su proa a un sueño
y ese sueño lo clavó en la cruz
en la flor de la sangre,
de su amor.
Y al tono de la locura
está afinado el cuerno
con que he de dar la orden de partir.
Estoy solo contra el cielo
sobre el mar de rojo entero
y la voz del fuego es la de un dios
que aprendió entre los hombres
su canción.
Astrolabio de madera,
camino de las estrellas
y en tus ojos brilla el azimut
El vigía anuncia tierra
y hay que descolgar las velas
con fecha de enero a plena luz
de la sal, se abre el viento
como el mar.
Autor(es): Manuel García, Mario Villalobos