Charly García

La chica que se robó al mundo


Imprimir canciónEnviar corrección de la canciónEnviar canción nuevafacebooktwitterwhatsapp

Corría el año mil novecientos sesenta y tantos, cuando el disparo de la escopeta del Coronel Díaz destruyó la bocina parlante que interrumpía su sagrada siesta.
Nuestra heroína, conocida en Paso del Rey como “Say”, tuvo que conectar la radio al viejo combinado ortofónico para captar la señal de la pared de sonido. La única emisora que daba noticias de los platillos voladores.
Ella, tenía la manía de robar globos terráqueos de escuelas, instituciones y bibiotecas.
Se aferraba al mundo con vehemencia, sintiendo que en parte, ya se lo habían sacado
un poco, y no quería perderlo todo.
Una noche de lluvia el tren plateado en donde Say viajaba todos los días en busca de
conocimientos imposibles se detuvo misteriosamente, así como los relojes, los automóviles, y todo aquello que estaba a la vista de los azorados pasajeros. Sólo su radio a transistores siguió funcionando. Repetía continuamente “Clatú”, “Bracta”, “Nicto”, “Clatú”, “Bracta”, “Nicto”.
Dicen que ese mismo día algunos seres espaciales embarazaron a las más bonitas señoras de Paso del Rey. Si alguien te saluda con un “Clatú”, “Bracta”, “Nicto”, o levantando la mano derecha con un brazalete “Say No More”, no dudes en considerarlo un amigo y aliado. Sus poderes telepáticos y telequinéticos son capaces de paralizar la Tierra, como advertencia a los que no se imaginan nada, a los que se siguen llamando “chabones”, a los que piensan que todo tiempo pasado fue mejor, a los que pretenden detener el poder del idealismo.