
Cántame un pasodoble
En una reja , llena de flores
herida por una rosa en el corazón
una mujer consumía las ilusiones
cantando bajo la noche coplas de amor.
De amores, guerras , claveles rotos.
De amores arde en la llama de una pasión.
De amores resplandecían sus ojos moros
como los tesoros del rey Salomón.
Cuando la luna se esconde
y el aire huele a jazmín,
entre los brazos de un hombre
la encuentra la noche
diciéndole así:
Ay, cántame un pasodoble,
un pasodoble torero
con voz de hombre.
Ay, que en tus ojos me muero
al compás de un pasodoble
entre tus brazos me echo a vivir.
Con arte y garbo torero
aunque a nadie ya le importe
cántame un pasodoble,
un pasodoble torero
lleno de sol y jazmín.
La luna va por los cielos de centinela,
que a una mujer le han su corazón
una noche clara y fría llena de estrellas
en una reja de flores se enamoró.
La culpa de esa agonía la tiene un hombre
que en un beso prisionera se la llevó
y en una cárcel de sueños y resplandores
caricias y flores allí la dejó.
Cuando el amor encendía
las luces del corazón,
las niñas de Andalucía
así me decían
con esta canción:
Ay, cántame un pasodoble,
un pasodoble torero
con voz de hombre.
Ay, que en tus ojos me muero
al compás de un pasodoble
entre tus brazos me echo a vivir.
Con arte y garbo torero
aunque a nadie ya le importe,
cántame un pasodoble,
un pasodoble torero
lleno de sol y jazmín.
Autor(es): Carlos Cano