Letanias del sembrador ausente
Sembrador ausente de mi tierra larga,
estas letanías me salen del alma.
Me salen del alma.
Cuando todo era puma y paja brava
y decir la Pampa,
decir cosa mala.
Cuando aún no había ni medios ni ganas,
llegaste un buen día de la vieja Italia,
de España o no importa de dónde llegaras,
sembrador ausente de mi tierra larga.
Primero una melga, después, una hectárea,
trocadas al monte de a grano por rama.
Se hizo pan el trigo donde el monte estaba
y se hizo molino, y al lado tu casa,
y en ella tu hijo, con él, la esperanza.
Sembrador ausente de mi tierra larga...
Ha pasado el tiempo con todas sus alas
y hoy tus sementeras se comen las vacas.
Tus campos de trigo se hicieron de alfalfa
y el viejo molino, plural en la Pampa,
fiel a tu recuerdo, sigue dando agua.
Sembrador ausente de mi tierra larga.
Estas letanías salieron del alma...
Me salen del alma.
