Un gusto a mujer
Nos conocimos de noche, por casualidad 
Y nuestros nombres mentimos, por seguridad 
Y es que ella tenía en su mente no volverme a ver 
Pero en un cuarto alquilado me dio su querer. 
Y ahora, nada me queda de ella después del amor 
Pude olvidar su mirada, su piel y su vos. 
Pude quitar de mis manos la tibia humedad 
Que entre gemidos y abrazos dejaba escapar, 
Sin un respiro y seguía de forma brutal 
Dándome amor y sin tregua me hacía vibrar 
Pude olvidarme de todo pero me quedé 
Con una marca que nunca quitarme podré. 
Pues me dejó un gusto a mujer en la boca 
Que no encontré besando probando otros labios jamás 
Pues la busque besando de manera loca 
A miles de bocas, ninguna fue igual.
