
La Lirio
En
un café de marineros,
y en el café hay una niña
color de lirio moreno.
Lirio le llaman por nombre
y ese nombre bien le está:
por un cariño, cariño,
las ojeras .
Y de Cádiz hasta Almería,
con voz ronca de aguardiente,
canta la marinería:
La Lirio, la Lirio tiene,
tiene una pena la Lirio,
que se le han puesto las sienes
de martirio.
Se dice que es por un hombre,
se dice que si es por dos;
pero la verdad del cuento,
¡ay, Señor de los Tormentos!,
la saben la Lirio y Dios.
A la mar, ,
a la Virgen, cirios,
y , madre de mi alma,
negras,
las que la Lirio.
Un hombre vino de Cuba
que a la Bizcocha ha pagao
cincuenta monedas de oro
por aquel lirio ,
por aquel lirio .
Que fue con un bebedizo
de menta y ajonjolí,
que fue una noche de luna,
que fue una tarde de abril.
Y de Cádiz hasta Almería
canta el novio de la Lirio
con una voz :
La Lirio, la Lirio tiene,
tiene una pena la Lirio,
que se le han puesto las sienes
de martirio.
Se dice que es por un hombre,
se dice que si es por dos;
pero la verdad del cuento,
¡ay, Señor de los Tormentos!,
la saben la Lirio y Dios.
A la mar, ,
a la Virgen, cirios,
y , madre de mi alma,
negras,
las que la Lirio.
Autor(es): José Antonio Ochaíta, Rafael de León, Manuel Quiroga