Sigo vivo
Cuando me pongo a pensar,
cuando empiezo a analizar,
cuando recuerdo aventuras con amigos
nos reímos sin parar,
no dejan de preguntar
cómo carajos no he muerto en el camino.
Al reunirme una vez más
con esa gente especial
que yo elegí entre los que me dio el destino...
por ellos quiero brindar,
por todo lo que me dan
es hora de celebrar que sigo vivo,
ohhh, ohhh, ohhh...
Me he metido en cada lío
que no sé cómo estoy vivo.
Me he pegado con las manos y con palos, sin piedad
he roto caras y también me la han partido.
Del peligro me he reído,
he jugado con los míos,
a ciento noventa y cinco he conducido,
las tripas en la calzada podría haber esparcido.
Con mil damas he jodido
a veces desprotegido,
he fumado y he bebido hasta que he perdido
el sentido despertando en casa de un desconocido.
Hasta dónde me he excedido
con algunos aditivos...
He sentido tan aprisa mis latidos que no sé
cómo mi corazón rebelde ha resistido sin petar,
y la verdad, suelo frivolizar
hablando de hasta dónde pude llegar,
divertir con historias a los demás
y reír sin parar y no pasa nada porque
en realidad nada puedo arreglar,
el pasado no importa, no va a cambiar,
esta vida es corta y no quiero llorar más,
mas que al menos sirva para no volver a tropezar.
He cometido tantos errores,
he tomado tantas malas decisiones, tantas,
que yo a veces me pregunto cómo lo puedo contar
y me río de mí mismo, no lo puedo remediar.
Y ya no sé con cuántos demonios
he luchado, cuántas guerras he librado, cuántas,
pero miro el lado bueno y sólo me puedo alegrar,
he vivido mil historias y te las puedo narrar.
Cuando me pongo a pensar,
cuando empiezo a analizar,
cuando recuerdo aventuras con amigos
nos reímos sin parar,
no dejan de preguntar
cómo carajos no he muerto en el camino.
Al reunirme una vez más
con esa gente especial
que yo elegí entre los que me dio el destino...
por ellos quiero brindar,
por todo lo que me dan
es hora de celebrar que sigo vivo,
ohhh, ohhh, ohhh...
Me he caído y me he quemado por hacer el animal,
me he lanzado a la aventura y no me he parado a pensar,
he probado casi todo lo que se puede probar,
pero nunca me he enganchado y estoy limpio de verdad.
Me jodí las cervicales por creerme Superman,
el doctor me dijo que jamás volvería a entrenar
pero yo no le hice caso y me pude recuperar,
y ahora estoy como una rosa, demasiado bien me va.
Estuve en situaciones complicadas, lejos del hogar,
sin plata y sin opciones, obligado a pelear,
estaba enfermo y asustado me sentía en realidad,
(mamá llegó a pensar que no iba a regresar).
Recuerdo aparecer una familia dispuesta a ayudar
y no se lo pensaron, ofrecieron un hogar.
El conocer a aquella buena gente fue casualidad,
más te puedo jurar, no les puedo olvidar.
No creo en Dios, pero debo tener
un ángel de la guarda que me debe querer,
trabaja demasiado si ha logrado proteger
a ese loco desatado que a menudo solía ser.
No creas que yo del todo cambié,
a veces mi alter-ego me logra poseer,
si pasan de la raya, peligroso puedo ser
y mi gente en esas situaciones no sabe qué hacer.
No estoy orgulloso, pero bueno,
tengo motivos para estar contento, desde luego,
a fin de cuentas puedo decir que me siento lleno,
no me quemé del todo a pesar de jugar con fuego
(más), es como si todo fuera un juego,
a toda prisa, una carrera sin pisar el freno,
vivo el presente y miro el pasado con desapego,
brindo porque a la suerte no he sido del todo ajeno.
Cuando me pongo a pensar,
cuando empiezo a analizar,
cuando recuerdo aventuras con amigos
nos reímos sin parar,
no dejan de preguntar
cómo carajos no he muerto en el camino.
Al reunirme una vez más
con esa gente especial
que yo elegí entre los que me dio el destino...
por ellos quiero brindar,
por todo lo que me dan
es hora de celebrar que sigo vivo,
ohhh, ohhh, ohhh...
