El Tiempo Del Tango
Yo soy del tiempo del tango
Hasta el más chulo era blando
Ante aquella flor exótica.
Bailando te desfogabas,
Era así como curabas
la resaca melancólica.
Traje gris, camisa blanca.
Bajabas al Mikado,
¡Cuántos domingos a mis anchas!
Mujeres en avalancha
Mirándote alrededor,
Ciñendo aquella exuberancia
Mientras bailaba el tango.
Eran mujeres hermosas,
Divertidas, cariñosas,
No eran crías ni mundanas
Y Madame, usted qué quiere,
Después de tanto currele
Por fin el fin de semana
Si de pronto y por azahar
Florecía la pasión,
Ellas se daban con sus miles.
¡Cuánto amé yo a las mujeres
Y también cuánto me amaron!
Dar marcha atrás si yo pudiera
Como el bailar el tango.
Tangos había a patadas
Pero el que a mí me encantaba
Era "El día que me quieras"
Al bailarlo susurraba,
Eso a ellas les chiflaba,
Era tocar las estrellas.
Ella no era Valentina
ni Graciela ni Margot
La chica de cintura fina
Sino la reina de Argentina
Y era yo su trovador
¡Qué tiempo aquel, qué maravilla!
Me enloquecía el tango.
Pasa el tiempo, es un temblor,
La juventud y el amor
Pasan dejando una herida
Otros llegan, es normal
El turno de cada cual
En el baile de la vida.
Tu no olvides, corazón,
Que has amado y te han amado,
Que no te roben la ilusión,
Que no se apague la pasión
Ni te quiten lo bailado,
Que no se calle el bandoneón,
Que no se acabe el tango.
¡Que vuelve el tiempo del tango!
