Ser Y No Ser
No soy presidente de mi vida,
no soy el director de mis sentidos,
no soy dirigente de mis días,
pero soy el ministro de mis momentos,
de mis motivos y sentimientos.
No somos reyes de nuestras leyes,
somos dueños de nuestros sueños,
más, somos amos de nuestras manos,
también dioses de nuestras voces.
Soy emperador de todos mis movimientos,
soy el verdugo de mis defectos,
soy el domador que acorrala mis fieras dudas,
no quiero ser anfitrión cuando me visite la muerte,
lanzaré una moneda a la suerte.
Eres tú, quien dicta tus deseos,
eres líder de todas tus locuras,
eres quien organiza tus ideas,
responsable de todas tus palabras, de todo lo que hablas.
No somos un uno, único,
ni mitad del estéreo,
ni mono básico,
plural del singular extraordinario,
somos autónomos con dosis de heterónomos.
