
El Sabor De Las Cerezas
Me aterraría descubrir que soy yo
la enfermedad que te ahoga
porque jamás quise a nadie de esta forma
tan suicida, tan suicida
que antes de oírte decir
que te astillé el corazón
me alejaré de ti aunque se destruya el mío.
Pero no quiero ni pensar que el sabor
de las cerezas te amargue
todavía más que mis labios al besarte.
Y como tú no eres santa
ni yo Nobel de la Paz,
para no odiarnos los dos
pondré un final con dolor a nuestro dolor sin final.
Nos despedimos apenas con los ojos
y al cerrarlos se vencieron los cimientos
de todo mi cuerpo.
No quiero volverlos a abrir,
en esta tarde prefiero
sentir a oscuras que muero
contigo a despertarme sin ti.
Nos despedimos apenas con los ojos
y al cerrarlos se vencieron los cimientos
de todo mi cuerpo.
No quiero volverlos a abrir,
en esta tarde prefiero
sentir a oscuras que muero
contigo a despertarme,
contigo a despertarme,
contigo a despertarme sin ti.