Ezequiel
Ezequiel,
compañero de pupitre, mil novecientos setenta y seis.
Ezequiel,
te espera a la salida para zurrarte si te atreves con él,
luego ya haréis las paces en la taberna del moscatel
Ezequiel hace años que no habla,
nadie lo escuchaba, renunció a las palabras.
Se expresa bien dibujando con un dedo en el aire,
le importa un bledo que no lo mire nadie.
Ezequiel,
qué será de ti, muchacho, si pareces un tarado.
Toda la tarde con Blay en la máquina de marcianos.
Hemos crecido jugando debajo de la palmera,
ensayando a cámara lenta nuestra próxima pelea.
Ezequiel hace años que no habla,
nadie lo escuchaba, renunció a las palabras.
Se expresa bien dibujando con un dedo en el aire,
le importa un bledo que no lo mire nadie.
Encontró un casa abandonada y no viene a clase ninguna mañana.
Qué será de ti, muchacho, cada día más delgado,
qué será de ti, muchacho, qué será de ti, muchacho,
cuando escapen los marcianos con tus ídolos de asfalto.
Ezequiel hace años que no habla,
nadie lo escuchaba, renunció a las palabras.
Se expresa bien escribiendo con un dedo en el aire,
le importa un bledo que no lo mire nadie.
Ezequiel sigue viendo visiones
en la enfermería del correccional de menores.
El haloperidol le provoca temblor,
el prolixín no le sienta ...
Mejor hacer caso al doctor esta vez
y evitar el castigo al anochecer ...
