
Retirada [o La retirada]
La distancia entre los dos es cada día más grande,
de tu amor y de mi amor no está quedando nada,
sin embargo el corazón no quiere resignarse
a escuchar el triste adiós que sea tu retirada.
Cuando te hayas ido ya, pedazo de mi vida,
si aguanté la soledad, recuérdame un poquito,
porque yo te supe amar, derecho y sin mentiras,
y te voy a recordar, por Dios, que muy bonito.
Déjame algo de recuerdo, una lágrima y un beso,
y un cachito de tu pelo, de mí no te lleves nada,
porque ya lo tienes todo, yo soy tuya, todo tuya.
Autor(es): José Alfredo Jiménez