La compañía
No no no hay! No hay pan ni trabajo
No no no hay! No hay trabajo ni salud
Sólo me dan soluciones imposibles
Estos tiempos son muy duros
Hay que aferrarse a la cruz
La cruz siempre nos ampara
Depositamos nuestra fe
Jesucristo y compañía,
sucursales en el mundo
No importa el color de piel
Ay Jesucristo! No tenés perdón de Dios
En tu fábula decía que los pobres importaban
Acá esto no se entendió
La piel de este comerciante,
limpia, sin manchas de cal
Pon tu plata cuando mueras
Tu alma descansará en paz
Ay Jesucristo! No tenés perdón de Dios
En tu fábula decía que los pobres importaban
Acá esto no se entendió
Ay Jesucristo! No tenés perdón de Dios
Una empresa bien formada
que está llena de oligarcas
La gente se lo creyó
