Oh! María
Dulce juventud,
La que ya pasó,
Éramos dos niños descubriendo un nuevo amor,
Tan callado tú,
Tan ingenua yo,
Siempre tumbados donde más quemaba el sol.
Pero sucedió,
Lo que suele suceder,
Que yo de repente me hice toda una mujer,
Te quedaste tú,
Solo y sin amor,
Detrás de mí cantando siempre tu canción...
"¡Oh-oh! María, María, María,
Lo que daría porque fueras sólo mía,
¡Oh-oh! María, María, María,
Siempre en tu puerta, siempre aquí día tras día,
¡Oh-oh! María, María, María,
Me estás quitando poco a poco la alegría,
¡Oh-oh! María, María, María,
Mi amor te espera siempre a ti, María."
Pero recuerdo que un buen día ya no estabas,
Te eché tanto de menos y escuchaba, pero nada,
Amor mío, te fuiste y lo comprendo,
Tenías tus motivos, pero vuelve, ¡por favor!
Ahora cuento los amores,
Que han pasado por aquí,
Desde aquel día en que te quise y no te vi,
Y ninguno consiguió,
Conquistar mi corazón,
Nadie ha sabido repetirme tu canción...
"¡Oh-oh! María, María, María,
Lo que daría porque fueras sólo mía,
¡Oh-oh! María, María, María,
Siempre en tu puerta, siempre aquí día tras día,
¡Oh-oh! María, María, María,
Me estás quitando poco a poco la alegría,
¡Oh-oh! María, María, María,
Mi amor te espera siempre a ti, María."
Pero recuerdo que un buen día ya no estabas,
Te eché tanto de menos y escuchaba, pero nada,
Amor mío, te fuiste y lo comprendo,
Tenías tus motivos, pero vuelve, ¡por favor!
"¡Oh-oh! María, María, María,
Lo que daría porque fueras sólo mía,
¡Oh-oh! María, María, María,
¡Me estoy muriendo poco a poco sin tu amor!"
