
En Parihuelas
En parihuelas, el viento y la brisa llevan
a dos alas que no vuelan
porque fueron alcanzadas
por saetas disparadas
desde un alto hecho de estrellas
que odian ser apagadas
pa que alegre vuele el alba.
En parihuelas, el llano y la sierra llevan
dentro de otra primavera
que volvió a llegar tardía
y vacía de colores, de olores y alegrías,
primavera de tres flores
y dos no verán el día.
Que en sus tripas trae la noche
primavera de tres flores
y dos no verán el día
que en sus tripas trae la noche. ¡No!
En parihuelas, mi llama y mis velas llevan
a las abejas que me dejan
la cera de su panal.
Y da igual si mañana esas abejas
de pronto de mí se alejan
y se me acerca el final
ha merecío la pena
haber ardío y alumbrar,
alumbrar junto a otras velas
alumbrar sin deslumbrar
ha merecío la pena
haber ardío y alumbrar
y haber protegío la llama
si arreciaba el temporal
ha merecío la pena
En parihuelas, mi alma y su luz llevan
los suspiros del latido
de un corazón que bombea
la sangre que ya ha vertido
y la que aún le queda
para mover el tiovivo
que le acompaña en su feria.
En parihuelas, el polvo y la arena llevan
al camino y a la suela
que traen los pies heridos
del pateo que se han metido
tras los pasos de sus huellas
de la mano del destino
pa' descansar bajo tierra
pa' descansar bajo tierra
de la mano del destino
pa' descansar bajo tierra
pa' descansar bajo tierra
En parihuelas, mi llama y mis velas llevan
a las abejas que me dejan
la cera de su panal.
Y da igual si mañana esas abejas
por suerte de mí se alejan
y se me acerca el final
ha merecío la pena
haber ardío y alumbrar
alumbrar junto a otras velas
alumbrar en soledad
ha merecío la pena
haber ardío y alumbrar
y haber protegío la llama
si arreciaba el temporal
ha merecío la pena
En parihuelas, tu boca y mis labios llevan
besos heridos
En parihuelas, tu boca y mis labios llevan
besos heridos, besos heridos