
Quemando Recuerdos, Penas Y Sueños Y Otros Enseres
Voy a hacer una hoguera en las traseras del
Olvido con pasto de las aceras y ramas secas
De olivo, pa quemar los recuerdos que acosté
Entre retamas y viendo venir las llamas, en mi
Rama han hecho un nido. Y voy a empezar quemando
Los que pinchan por detrás, los que me siguen
Ladrando aún llevando bozal, los que guardan
Desamores con sus gritos y dolores y me agotan
A su helor que congela mis cojones. Y otros que
Me encierran y me siguen dando guerra. Y no quiero
Conflictos ni soy adicto a peleas que se asean en la
Ignorancia y pasean su fragancia sin clase, arte
Ni gracia, y muy poca tolerancia.
Y voy a quemar también a los que me atan corto
Y no me dejan correr. Y otros que descuidé y, ahora,
Van sucios y rotos de vivir en mi alboroto, de
Gritarme al susurrar pa decirme poco, o ná,
Pa decirme: estás muy loco!!_ y tres cojones
Se me dan; se que sangro si me corto y, no
Hace falta probar.
Y en silencio, arramplo madera p´avivar el fuego,
Pa que no se muera, que aún tengo recuerdos
Que me tocan los güevos y los quiero quemar.
Y ya que ando metio en faena, añado a la
Chosca un par de penas y sueños doloridos
Si me desvelan. Y solo me consuela la luz
De tus ojos cuando, alegres, rielan en mi
Oscuridad.
Y quemo también, el sonido de los golpes que
Provocan mis traspiés al caminar por
Las calles del desorden, donde se esconde
El latido de lo que pudo haber sido y ya
Nunca será y, aunque escucho sus quejios,
No me llegan a ablandar, y convencio
Asumo, que se conviertan en humo.
Voy a quemar también