
Yo vengo a ofrecer mi corazón
¿Quién dijo que todo está perdido?
Yo vengo a ofrecer mi corazón.
Tanta sangre que se llevó el río,
yo vengo a ofrecer mi corazón.
No será tan fácil, ya sé que pasa,
no será tan simple como pensaba,
como abrir el pecho y sacar el alma,
una cuchillada de amor.
Luna de los pobres siempre abierta,
yo vengo a ofrecer mi corazón.
Como un documento inalterable,
yo vengo a ofrecer mi corazón.
Y uniré las puntas de un mismo lazo
y me iré tranquila, me iré despacio,
y te daré todo y me darás algo,
algo que me alivie un poco más.
Cuando no haya nadie cerca o lejos
yo vengo a ofrecer mi corazón.
Cuando los satélites no alcancen,
yo vengo a ofrecer mi corazón.
Y hablo de países y de esperanzas,
hablo de la vida y hablo de la nada,
hablo de cambiar esta nuestra casa,
de cambiarla sólo por cambiar.
¿Quién dijo que todo está perdido?
Yo vengo a ofrecer mi corazón.