
1987
Una tormenta solar quemándonos el costado,
moviéndonos hasta lograr no estar en ningún lado.
La luna, la luna, la luna que guía y encandila
y el corazón que finge decisión pero vacila.
La noche cumple solo lo que no promete,
la brújula se mueve, estamos en 1987.
Reír y reír y reír en el eco del abismo,
la lógica de confundir espejo y espejismo.
La luna, la luna, la luna lamiéndonos la fiebre
y el corazón que solo se encuentra si antes se pierde.
El mundo vira sin saber dónde se mete,
la brújula se mueve, estamos en 1987.
Autor(es): Juan Campodónico