Quédate
Queda tanto por sentir, queda.
Queda el eco de tu voz
rellenando los huecos vacíos,
mil traducciones de tu adiós,
un interrogante suspendido.
A mil besos de profundidad queda
el dolor ahogado en mi copa de vino.
Queda el sabor de tus labios
burlando la dirección de su destino,
mi alma descifrando tus silencios,
la tuya interrogando a los míos.
Queda, queda, queda,
queda tanto por sentir.
Queda, queda, queda, quédate.
No habrá punto final
si queda un punto suspensivo.
Queda, queda, quédate conmigo.
Queda tu maleta junto a mi silueta
bailando por mi colchón,
queda una canción sin terminar,
un último verso sin conclusión.
Queda un recuerdo en mi corazón
orbitando alrededor de tu ombligo.
Mil emociones perdidas
siguiendo el aire de tu suspiro,
quedan mil palabras desgastadas,
quizá solo hace falta un gesto.
Quédate.
Autor(es): Daniel Carbonell "Macaco"