Flor de las bellas ciudades del mundo
Don Quijote y Sancho partieron a Barcelona,
dejando atrás el Ebro por atajos y sendas.
A su playa llegaron en la noche, la víspera de San Juan,
y dio lugar la aurora, poco a poco el sol levantó.
Y vieron el mar hasta entonces de ellos no visto.
Parecióles espaciosísimo, más que las lagunas de la Mancha.
Vieron también las galeras que estaban en la playa,
tremolaban al viento y besaban y barrían el agua.
Patria de los valientes, de los extranjeros albergue.
Única en sitio y belleza, ejemplo de lealtad.
Venganza de los ofendidos, de sus moradores delícia.
Archivo de la cortesía, de los pobres hospital.
El mar alegre, aire claro, tierra jocunda.
Flor de las bellas ciudades, de las bellas ciudades del mundo.
Autor(es): Montse Castellà, Miguel de Cervantes
