
El copeo d'Ontinyonet
A cantar el copeo nadie me gana,
que me lo enseñó anoche una gitana.
Rode la bola, rode la bola.
En Jijona segando me corté un dedo
y una valencianita me dio un pañuelo.
Rode la bola, rode la bola.
El pañuelo, de sangre quedó manchado,
y mi corazón, niña, “anemorado”.
Rode la bola, rode la bola.