
La isla de Fidel
En mi casa el mundo
tiene otro color
la diferente manera
de creérselo
humanidad humanizada
humano amar.
En mi patio
el río corre sin temor
hacia un destino, un sentido distinto
hacia un yo qué sé
sincero sentimental sentimiento.
Enamorada al día
tuya y mía
miniatura colosal
que se muere por su panal
más allá del allá o acá.
En mi patria
la vida se resiste a odiar
se determina y camina
corriendo hacia su lugar
aire de sol
cura dolores
llanto de mar.
En mi pobreza
la escuela no se cerró
con cascarilla, aguardiente
con flores, tabaco y miel,
dos velas y una oración
para Fidel.
Lleva una flor herida
sin espinas
una desilusión
y unas ganas del corazón
con la sonrisa triste y feliz.
En mi huerto
el miedo no llegó al terror
ni los peores errores
sirvieron para morir
la dictadura
fue neuronálgica y pasional
En mi sueño
mi sueño no se cumplió
pero se acerca bastante
a lo tanto que se soñó
y aquí estamos
aquí seguimos guevariándolo
Revolución querida
sobreviva
vida de tu nación
revoluciona por tu amor
cada vez más
tu corazón.
Autor(es): Santiago Feliú