Y sigo aquí
El patio de mi casa era
Un castillo en mi imaginación
Una puerta abierta a la frontera
Para pintar esas murallas de mi niñez -Me urgía crecer-
Trepando los árboles con seria madurez
Tan dueño del aire, del agua,
Del fuego y la tierra de mis manos
Con mis hermanos declarando la guerra
Y así crecí jugando a ser feliz.
La calle de mi casa era
Un deporte de investigación
La ventana a un raro mundo afuera
Para volar por las aceras con mi Bimex -Con gran avidez-
Subiendo las bardas cual Torres de Babel
Erigiendo aventuras, naufragios
Con cajas de cartón en los baldíos
Como bandidos huyendo del tiempo
Y allí aprendí a ser amigos hasta el fin.
El final del partido nocturnal
Lo marcaba el silbido de mi padre a cenar.
El barrio de mi casa fue
Un calor de interna precaución
Me escondí para que no supieran
Que la verdad amaba a aquella Denisse de diez -No podía creer-
Que en prístinos labios hallara ingravidez
Pero con su mudanza y la lluvia en mi rostro
Aprendí a decirle adiós antes de amor...
Me dijo “Espera” y estoy aquí
Me dijo “Espera” y yo sigo aquí
Me dijo “Espera” y sigo aquí
