Hipersomnia Crónica
Descubro ahora que,
setenta años después,
sigo buscando en
otro espacio mi libertad.
Son décadas aquí,
manteniendo firme mi
integridad mental, y vi
que vivo en un cuadro de Dalí.
Mi onírica visión.
Mi hermética ilusión.
Magnénica ficción.
Y sin embargo es la realidad.
Es una perfección,
creada sin razón,
por esa imperfección
a la que llamais humanidad.
Estoy atrapado en fase REM.
Hablo claro con Dios, es él.
Me ha prometido el infinito.
Es incontable la inmensidad
de este desierto no terrenal,
del sufrimiento descomunal.
Veo la andrómeda. Veo metáforas.
Es incontable la inmensidad
Oiga señor pintor, ¿qué clase de embrujo es este?
¡Sáqueme de aquí! Me persiguen desde siempre,
criaturas ilógicas, abstractas,
elefantes con kilométricas zarpas,
Equilibrándome en paisajes antropomórficos,
se derriten los relojes analógicos,
¡Sáqueme de aqui! de este mundo laberíntico.
me bloqueo ante elementos metafísicos.
Aspirar...
Inspirar...
Y girar... en la espiral...
Es hipersomnia (qué! qué!) crónica.
Oiga señor pintor, ¿por qué no usa su talento?
dibuje una salida, no quiero estar más dentro...
se lo ruego, no me gusta ser un ente.
no veo ninguna firma... ¿no estará usted ausente?
