
Que digan María, María, María
María, María, María,
con las cinco letras
que tiene tu nombre
voy a hacer para ti una canción.
Y tendrás en tu alma
el regalo de un hombre
lleno de ternura,
dulzura y amor.
Esas cinco letras
quisiera mirarlas
prendidas del cielo
de noche y de día.
Estrellas colgadas
del sol a la luna
que formen tu nombre,
que digan María.
Yo quisiera amarte
como aquel que amando
se murió de amores;
y poder cortarte
del jardín del cielo
las más lindas flores.
Yo quisiera amarte
como aquel que amando
se murió de amores;
y poder cortarte
del jardín del cielo
las más lindas flores.
María, María, María.
Autor(es): José Alfredo Jiménez