El veneno de Moriana
-¿Qué me diste Moriana,
qué me diste en este vino?
¡Las riendas tengo en la mano
y no veo a mi rocino!
-¿Qué me diste Moriana,
que pierdo todo el sentido?
¡Sáname de este veneno:
yo me he de casar contigo!
-No podrá ser, don Alonso,
que el corazón te ha partido.
¡Desdichada de mi madre
que ya no me verá vivo!
Autor(es): Anónimo, Paco Ibáñez