
La sed
Dejar caer esas promesas
y renunciar al equilibrio.
Dime si has olvidado lo que importa.
¿Si has de elegir entre la mentira
más dulce y la puta verdad?
Dime que no has olvidado lo que importa.
Ser capaz de anudar tu voz
y conservar la sed.
Y aprender a erizar tu piel
frente al más cruel abismo.
No quiero despertar
de un gran letargo
y sorprendernos abrazados
en una enorme jaula de cristal.
No quiero, no quiero, no quiero...
Ser capaz de anudar tu voz
y conservar la sed.
Y aprender a erizar tu piel
frente al más cruel abismo.
¿Cómo saber qué es la sed
si no dejamos de beber?