Maitia nun zira


Imprimir canciónEnviar corrección de la canciónEnviar canción nuevafacebooktwitterwhatsapp

¿Dónde estás, amada mía? No te veo, ni tengo noticias tuyas,
¿dónde te has perdido? ¿Acaso ha cambiado tu designio?
Me dijiste, una y otra vez que eras mía.

Soy la de siempre, no he cambiado, mi corazón decidió amarte a ti.
Un padre celoso ha provocado esto.
Él me priva de verte y hablar contigo.

Padre celoso, mandas a tu hija, como si huyese de mí, a ese convento.
De todos modos no ingresará monja. Mantenemos nuestra palabra,
nos hemos prometido, es la pura verdad.

Ven a verme cabalgando en tu caballo, ven a consolarme,
a escondidas de mi padre. Tengo cumplidos veinticuatro años,
dentro de otro más, ya no tendré que preocuparme de mi padre.

A todas las hijas les digo: "fijaros en mí, haced lo que yo os digo.
Mientras son jóvenes, la disciplina es buena!
Cuando sean mayores, será tarde entonces; bien que lo sé".


Autor(es): Popular vasca