Teresa
Tiene un secreto Teresa que a nadie cuenta,
y debe ser cosa triste pues todos lamentan
el que sus ojos negros no brillen tanto
y que se escape una lágrima, de vez en cuando.
¡Ay Teresa, mi vida, dime el secreto!
yo no lo cuento a nadie, te lo prometo.
Y Teresa anda llevando velas
y piensa que San Antonio no la consuela.
Yo le he dicho que el santo prefiere rosas,
sobre todo si las lleva una niña hermosa.
Que Teresa anda llorando a mares,
encerrada en sí misma niega la llave,
y es que cuando alguien vive cortando flores
es porque se sufre, sin duda, de mal de amores.
¡Ay Teresa, mi vida, dime el secreto!
yo no lo cuento a nadie, te lo prometo.
Y ahora es San Antonio quien está muy triste
pues no quiere ser imagen y a Dios insiste
en que le haga un milagro, ya que su deseo
es invitar a Teresa a dar un paseo.
De ella y su secreto nada se sabe,
sólo que una tarde la vieron marcharse;
nadie corta sus flores, y desde aquel día
la hornacina de Antonio, la hornacina de Antonio,
la hornacina de Antonio está vacía.
Autor(es): Paloma Ramírez, Alejo Martínez