El látigo de la indiferencia
Un hombre, caminaba su senda
buscando vagamente el ancla de su vida.
En su paso encontró gente
que aceró su carne y mente.
Gente cortante, fría e indiferente
Por ahí,
cerca de la Quebrada del Ají,
conocí la indiferencia
que en Chile libre nunca vi.
Otro hombre ha caminado su senda,
buscando vagamente, buscando,
en su paso encontró gente.
Gente cortante, fría e indiferente.
Autor(es): Álvaro Peña