
Hijos del calvario
Y somos tan frágiles,
tan llenos de dudas,
criaturas del miedo
que cortan el aire
con pasos de ciego.
Y somos tan cómplices
de nuestras desgracias,
no busques tan lejos,
mirando al espejo
descubres la causa.
No somos perfectos,
ya lo debes entender,
si vamos juntos de la mano
en esta guerra sin cuartel.
Dejemos ya de lastimarnos
si estamos en el mismo lado
si somos hijos del calvario,
y lo que tienes en las manos
es la sangre que te grita
que no aprendes del pasado.
Y somos tan lúgubres,
la luz es tan tenue,
y apenas miramos
los rostros de al lado
cerramos la puerta.
Y somos tan débiles,
tan llenos de angustia.
Las lágrimas bajan
por nuestras mejillas
cayendo en la herida.
No somos perfectos,
ya lo debes entender,
si vamos juntos de la mano
en esta guerra sin cuartel.
Dejemos ya de lastimarnos
si estamos en el mismo lado
si somos hijos del calvario,
y lo que tienes en las manos
es la sangre que te grita
que somos hijos del calvario,
y lo que tienes en las manos
es la sangre que te grita
que no aprendes del pasado.
Autor(es): Santiago Cruz