Consejos para un hijo
Hijo quiero aconsejarle,
escúcheme con ¨pasencia¨
es parte de mi ¨esperencia¨
lo que aquí voy a dejarle;
por eso voy a explicarle
con todito mi sentir
mucho tendrá que sufrir
pa poder llegar a viejo
y espero que este consejo
de algo le pueda servir.
Que sea honrao, es lo primero
que le quiero aconsejar,
al trabajo se ha de dar
con cariño y con esmero;
de esa manera el puchero
tranquilo lo irá ganando
de poco a poco labrando
un porvenir venturoso,
el pan será mas sabroso
si lo gana trabajando.
No debe ser compadrito
ni ha de pelear sin razón
en mas de una ocasión
tendrá que hacerse el chiquito
le aseguro, no es delito
si usted se resta importancia,
en mas de una circunstancia
se tendrá que ir apocando
aunque los esté sobrando
como puchero de estancia.
Trate de ser ¨ moderao ¨
sobre todo en el hablar,
si le gusta palabrear
puede ser perjudicao,
hablar poco no es pecao
y a ¨naides ¨ resta valor,
el hombre conversador
fácilmente se equivoca;
el pez por abrir la boca
termina en el asador.
En el campo del amor
hay que ser precavido
que si ud. se hace el dormido
puede pasarlo mejor;
aunque sea gambeteador
no andará siempre orejano,
tiene que ser muy baqueano
pa´ no tropezar ¡canejo!,
que ese campo es desparejo
como galope de gusano.
Puede gustarle jugar,
es propio del que es varón
pero tenga precausión
pa´ no meter las de andar.
Si juega no se ha de fiar
ni del pobre ni del rico,
por eso yo le suplico
y que comprenda le ruego,
que en las peleas y en el juego
no existe contrario chico.
Bueno mi hijo, este consejo
no es una simple ocurrencia
es parte de la ¨esperencia¨
que ha cosechado este viejo,
yo quiero que su pellejo
lo defienda donde cuadre
y recuerde que fue su padre
que lo quiso aconsejar
y que la vida se ha de jugar
por la Patria y por su Madre.
Autor(es): Adán Guzmán