Pa' que veas
La querés y creyendo que soy como sos:
un desleal y sucio mal amigo,
te acercaste pa' batirme que esa mina
es la joya más preciada para vos
ella es tu alma, el aire que vos respirás
y me pedís que yo no te la quite
que con ella también te arrancaría
las fibras, una a una, de tu última ilusión.
No te acordás aquella vez también
una mujer pa' mi era toda la existencia
y fuiste vos quien falso a todo tren,
me heriste aquí... de atrás... tan hondo, tan adentro
que nunca más cantó mi corazón...
Que si esto no bastó
pa' tu obra de trapero
diste a rodar vilezas y a batir
riéndote de mí
que yo no era un varón.
Esa mina me quiera, ya lo he visto bien
y con querer tan sólo fuera mía;
hoy las cosas, vos las ves, como cambiaron
pero ahora, nunca olvides la lección:
lo que vale ser macho como yo lo soy;
ahí te la dejo: amala como un hombre
y olvídate que un día me has herido.
¡Pa' que veas! Sotreta, como jugó un varón.
Autor(es): Dante A. Linyera, Juan Bautista Guido