Seda de esperanzas
Soy tan salvajemente tuya Buenos Aires
Que encuentro mi respiro en tus pulmones de cemento
Me vuelvo tan ilusamente dócil por tus calles
Que salgo a reencontrarme con mis sueños
Los que empeño
Y sólo entre tu gente que me duele, indiferente
Deshago los temores que se anidan y lastiman
Soy tan profundamente tuya Buenos Aires
Que encarno la tristeza de tus pibes que me piden
Me abraza el desamor sin un mañana, de sus ojos
Y escondo la vergüenza que me apena
Y que me quema
Y sólo entre tu gente que resiste ,buenamente
Reinvento ese coraje que me anima a estar mas viva
Algo habré de hacer con este amor que me condena
algo siempre cambia en el transcurso de una escena
todo lo que busco está en tu estirpe de malvón
todo lo que añoro, mi silencio y tu canción
algo habré de hacer con esta historia tuya y mía
algo que nos cambie este dolor por alegría
todo lo que tengo está en mi tango para vos
seda de esperanzas que se niegan a un adiós
Soy tan inmensamente tuya Buenos Aires
Que sufro la impiedad de tu esnobismo y de tu apuro
Me alegra sin embargo cada encuentro en la mirada
Con todos los que yugan cada día
Por la vida
Y sólo, entre tu gente y su fachada, desconfiada
Descubro aquella fe que parecía tan perdida
Soy tan furiosamente tuya y de tus aires
Que busco apaciguarme en el anhelo de otra historia
Me amparo en tus enojos y me enciendo en tus desdichas
Te abrigo en mis palabras que te envuelven
Y te absuelven
Y solo entre tu gente y su reflejo que es mi espejo
Me amparo en la poesía de tus barrios y tus días.
Autor(es): Patricia Ferro Olmedo, Liliana Vinelli