Dicen de mí
Dicen de mí que soy el perro de un mendigo.
No sé ladrar, pedir, que nada he defendido.
Suelen decir de mí que no sé lo que digo.
Pueden decir, pensar, pueden opinar.
Seré lágrima en el mar brillando entre la inmensidad.
Daré media vuelta más, me acercaré al que sé que es mi lugar.
Como un alud de sal cubriendo las heridas,
un manantial de alcohol, un jarro de agua fría.
Un madrugón sin fin de neveras vacía,
una versión de mí llega ya a su fin.
Seré lágrima en el mar brillando entre la inmensidad.
Daré media vuelta más, me acercaré al que sé que es mi lugar.
Entro en calor, bajo del limbo en el que estoy.
Entro en razón, creo que ya sé quién soy.
Dices de mí, dice de ti, dicen de sí, dicen de mí.
Dicen de mí que soy el perro…
