
Cuartetas por diversión
Miren qué diablo el vinacho
hecho con agua y romero,
se me sube a la cabeza
como si fuera sombrero.
Cantando me iré,
silbando me iré;
cantando lejos
me consolaré.
Esa mujer está loca,
quiere que la quiera yo.
Que la quiera su marido,
él tiene la obligación.
Me gusta ver a los pobres
cuando están enamorando:
el sombrerito a los ojos
y las hilachas colgando.
Las mujeres no me quieren
porque tengo el poncho roto.
Se arregla fácil, muchacha:
me saco este y me pongo otro.
Arriba de un alto pino
estaba Santa Julieta
haciéndose la coqueta
con Santo Tomás de Aquino.
Se me han acaba’o las coplas
y voy a mandar a tr’er,
en mi casa tengo un árbol
que de coplas se ha de qu’rer.
Autor(es): Popular chilena