Ella de Pontevedra


Ella de Pontevedra llego al país con ruidosas sorpresas
La murga sonaba fuerte y la muchachada bailaba

Trago va... trago viene...
Nunca se sabe si ha sido suficiente
Nunca se sabe si es tarde o temprano

Ella viva leyenda, eterna diosa del ritmo y la bailanta
Que duerma durante el día que por las noches será toda nuestra