El último sapukay
De los machetes en los quebrachos,
La pólvora entre los huesos,
Se hizo ceniza en dos pechos bravos.
Sin una vela encendida,
Sin una flor a su lado,
Sin una cruz en la tierra,
H ay dos sueños sepultados.
Camino de Pampa Bandera,
Lo esperan en una emboscarla,
Y en una descarga certera,
Ruge en la noche la metrallada.
Isidro Velázquez ha muerto,
Enancado a un sapukay,
Pidiéndole rescate al viento,
Que lo vino a delatar.
Pidiéndole rescate al viento,
Que lo vino a delatar.
Pidiéndole rescate al viento,
Que lo vino a delatar.