Beni
No hay atardecer más perfecto que el que me dio mi Beni
ni brisa más fresan, ni cálido resplandor.
Todos los guapurús del campo tienen algo de ensueño
y embriagan mi viajero corazón.
Esta tierra hermosa de húmedos rincones
refugia esa piel y te acerca a mí
y en sus dulces ríos conservo tus sabores
y el rocío del cual yo me hice de ti.
Dejo mi vida en estas notas
y el Mamoré navega junto a mí.
Autor(es): Christian Benítez