El viejo pablo


Él, que creía en tantas cosas,
Que despertaba con el sol.
Él, que por todo sonreía,
Y que aún soñaba ser mejor.
Pero los años pasaron ya,
Y el viejo Pablo qué solo está.

Laralá, laralá,
Laralá, laralá, laralá.

Cuando era mozo cortejaba
A las muchachas del lugar.
Pablo soltero se quedaba;
Nunca perdió su libertad.
Y ahora, de viejo, no tiene hogar.
¡El pobre Pablo qué solo está!

Laralá, laralá,
Laralá, laralá, laralá.

Pablo, cansado y encorvado,
Sus aventuras va a contar.
Él sólo pide que le escuchen;
Toda su vida fue luchar.
Pablo se muere y nadie hay con él...
Sólo su perro, que le fue fiel...

Laralá, laralá,
Laralá, laralá, laralá.