El niño que ya no soy


Logré el uso de razón,
perdí el uso del misterio.
Desde entonces la evidencia,
siempre rara me da miedo.

Me da miedo cuando ladra
en la perrera mi perro.
Quizás me esté saludando.
Más no le entiendo. No entiendo.

El niño que fui recuerda,
me trabaja como un hueco.
El niño que fui me llama
a gritos con su silencio.

Me he mirado en mis retratos,
de marinera, riendo,
con rizos rubios y un aire
impertinente y despierto.

¿Quién eres tú? ¿Qué sabías?
ahora sólo siento sueño.
Me aturde tu desafío
y tu risa me da miedo

Ya no puedo sin romperlos
atravesar los espejos.
Mi sistema no funciona
como solía. Lo siento.

Si funcionara, quizás
no escribiría estos versos.
Lloraría de otro modo.
Lo diría todo en perro.

Pero me creo que soy
algo más que un niño muerto,
y como estoy medio calvo
me hago bucles con mis versos.


Autor(es): Gabriel Celaya, Víctor Manuel San José