Hijo de tu hijo
se ilumina el universo y sus rincones 
y se alumbran los oscuros callejones
No hay lugar donde se esconda la mentira 
Hijo de tu hijo es el que llama, 
baila esclavo al son de su impaciencia, 
siempre listo en cada emergencia, 
corre y corre que el tirano te reclama
Más la impronta de esa tierna tiranía 
no es de odio, de codicia o de combate, 
te acaricia y tiene gusto a chocolate 
cuando el hijo de tu hijo ordena el día 
Cuando el hijo de tu hijo es quien te escucha 
no hacés trampa y es más claro tu argumento, 
sos el rey en el planeta de los cuentos 
y el más fuerte de los héroes de la lucha 
Hijo de tu hijo es el que llora 
y le aprieta un nudo a tu garganta 
que él mismo desata cuando canta 
pero vuelve a amarrarlo a cualquier hora 
Y jugando solo una vez más te deja 
y regresa el mandamás titiritero, 
con los hilos que son lazos verdaderos 
cuando el hijo de tu hijo los maneja
Cuando el hijo de tu hijo es quien te toca 
te estremece su finísima textura
te das cuenta que el sabor de la dulzura 
no se siente sólo al borde de la boca 
Hijo de tu hijo es el que salta 
y te mueve el piso y los talones 
y otros atributos de varones 
se te aflojan si algo ahora le hace falta
Y te asusta ver al tiempo que se pasa, 
o ni verlo, porque pasa en un segundo
menos mal que uno se baja de este mundo
cuando el hijo de tu hijo vuelve a casa