El lanzador de cuchillos
siendo el mejor lanzador que puedes encontrar
de todos es bien sabido que es comprometido
lanzar veinte cuchillos sobre una rubia platino.
Parece casi normal llamarse el Gran Sultán
alguien capaz de acertar mirando y sin mirar,
la chica esconde una gata que no llora ni habla
su risa no da confianza, la clientela se espanta.
Sangre en el cabaret
burbujas y champán
apagaré mi sed
en este manantial.
Sangre en el cabaret
burbujas y champán
afuera el mundo cruel
la duda realidad.
Sangre en el cabaret
salpica la pared
la noche es un volcán
de rojo amanecer.
Sangre en el cabaret
la noche puede arder
un grito de terror
suspende la función.
¡Abajo el telón!
Parece casi normal llamarse el Gran Sultán
si un apagón de la luz te prueba una vez más,
una ciudad cualquiera, un aullido en tinieblas
y el pobre pianista tuvo una suerte imprevista.
El astuto policía
averigua con su olfato
que la rubia se entendía
con el hombre del piano.
Autor(es): Víctor Manuel San José