Mi primer amor
Tras ella fueron mis ojos
Era una prenda deseada
Con un lenguaje muy propio
De presumida apariencia
Y vestidita al tono.
Me desplegaba sus alas
Para acortar las distancias
Ella también me apuró
Fue la compañera más leal
Que hizo de mi corazón
Un bombo que late a su compás.
Por eso quiero nombrarte
Mi linda novia del alma.
Solía dormida conmigo
Al piecito de mi cama
Le susurraba mis sueños
Ella me daba esperanzas
La amaba y me protegía
Duendecita solitaria.
Noble y de pocas palabras
Gracias por tus enseñanzas
Y por hacerme feliz tanto
Cuando tuve que penar
Fue tu consuelo mi luz
Su olor a madera de nogal.
Por todo te doy las gracias
Mi muy querida guitarra.