Las coplas del inseguro
No temas al vecindario
para consumar antojos:
la envidia no tiene horario
para sacarte los ojos.
Mejor dejar de fingir
porque antes de que amanezca
serás multado a vivir
por lo que te les parezca.
Las voces no tienen duende
para los tiernos amantes
son cosas de la corriente
y los nuevos navegantes.
Si duele pensar que el mundo
se extiende absurdo y prefieres
nadar hasta lo profundo
asume el riesgo que adquieres.
El amor no tiene freno
sólo el que el miedo le impone
cuando presume de bueno
se vuelve tan uniforme.
Entonces deja que vuele
tan lejos como supones
y si quemante se vuelve
al fuego lento disponte.
Más sabe el diablo por viejo
que por tener sus razones
al sol extiende el pellejo
y al viento las desazones.
Autor(es): Amaury Pérez