Popurrí José Alfredo Jiménez


Te vas porque yo quiero que te vayas,
a la hora que yo quiera te detengo,
yo sé que mi cariño te hace falta,
porque quieras o no, yo soy tu dueña.

Yo quiero que te vayas por el mundo,
y quiero que conozcas mucha gente,
yo quiero que te besen otros labios,
para que me compares hoy, como siempre.

Si encuentras un amor que te comprenda
y sientes que te quiere más que nadie,
entonces yo daré la media vuelta,
y me iré con el sol, cunado muera la tarde.
Entonces yo daré la media vuelta,
y me iré con el sol, cunado muera la tarde.

----------------------------------------------


Qué bonito amor, qué bonito cielo,
qué bonita luna, qué bonito sol.
Qué bonito amor, yo lo quiero mucho,
porque siente todo lo que siento yo.

Bien juntito a mí, quiero que tus manos
me hagan mil caricias, quiero estar en ti,
dame más amor, pero más y más,
quiero que me beses como tú me besas, y después te vas.

Yo comprendo que mi alma y la vida
no tiene derecho de quererte tanto,
pero siento que tu alma me quita,
me pide cariño y nomás, no me aguanto.

Qué bonito amor, qué bonito cielo,
qué bonita luna, qué bonito sol.
Si algo en mí cambió, te lo debo a ti,
porque aquel cariño que quisieron tantas, me lo diste a mí.

Qué bonito amor.

---------------------------------------------


Cuando te hablen de mar y de ilusiones,
y te ofrezcan un sol y un cielo entero,
si te acuerdas de mí, no me menciones,
porque vas a sentir amor del bueno.

Y si pueden saber de tu pasado,
es preciso decir una mentira,
di que vienes de allá, de un mundo raro,
que no sabes llorar, que no entiendes de amor y que nunca has amado.

Porque yo adonde voy,
hablaré de tu amor como un sueño adorado,
y olvidando el rencor, no diré que tu adiós
me volvió desgraciada.

Y si quieren saber de mi pasado,
es preciso decir otra mentira,
les diré que llegué de un mundo raro,
que no sé del dolor, que triunfé en el amor y nunca he llorado.

------------------------------------------------


Cuando lejos te encuentres de mí,
cuando quieras que esté yo contigo,
no hallarás un recuerdo de mí,
ni tendrás más amores conmigo.

Yo te juro que no volveré,
aunque me haga pedazos la vida,
si una vez con locura te amé,
hoy de mi alma estarás despedido.

No volveré, te lo juro por Dios, que me mira,
te lo digo llorando de rabia, no volveré.
No pararé hasta ver que mi llanto ha formado
un arroyo de olvido anegado, donde yo tu recuerdo ahogaré.