Sopa de letras
un desfile incesante de recuerdos,
la imagen transformada
de un amigo de otros tiempos
asfixiaba con su axila
cuatro libros,
cuatro sabios pensamientos.
En la parada del 5
le preguntamos: ¿dónde vas?
al centro nos respondió
y el que nunca más volvió
el barrio lo está esperando.
Gastó todo el sueldo en libros
qué manera de tirar la plata
se lo veía confundido
y la cabeza le pesaba
y la cuchara agonizaba
en una sopa de letras.
Sus amigos resultaron simples
dejó el barrio, se fue pa´ el centro
fue a parar entre intelectualoides
y snobistas mistificadores
y la cuchara agonizaba
en una sopa de letras.
Todas las noches en Corrientes
en La Paz o en La Giralda
chamuyando de cosas abstractas
con palabras rebuscadas
y la cuchara agonizaba
en una sopa de letras.
Empezó a usar anteojos,
sus ojos no veían bien
tan presumido el sabelotodo
que no podía comprender
y la cuchara se moría
en una sopa de letras.
Volvé al barrio, en el 5
porque el barrio es más lindo
volvé al barrio, en el 5
volvé al barrio...