A Ese Hombre
Mitad muchacho,
Que cuando habla
Se parece a un pavo real
Ni se te ocurra
Hacerle daño
Porque no entiende la diferencia
Entre el bien y el mal.
Estoy hablando de Adán.
A ese hombre
Ilusionado
Que la manzana tan prohibida
Fue a buscar
Que nadie intente
Hoy criticarlo
Pues su pecado
Nos ha traído algo original.
Estoy hablando de Adán.
Por eso ahora me pronuncio,
Desanuncio y denuncio
Que ves, no me separo ni a tiros,
De verdad.
Tanta inocencia hay en sus ojos
Que a cualquiera vuelve loco.
Su pureza es impaciencia
Y el pecado original.
A ese hombre,
Mitad muchacho,
Que por la vida se pasea
Como algo vital
Su paraíso
Es hoy de asfalto
Y le recuerdas
A la serpiente
Que me hizo pecar.
Hablando estoy de Adán.
Por eso ahora me pronuncio,
Desanuncio y denuncio
Que ves, no me separo ni a tiros,
De verdad.
Tanta inocencia hay en sus ojos
Que a cualquiera vuelve loco,
Su pureza es impaciencia,
El pecado original.
Tanta inocencia hay en sus ojos
Que a cualquiera vuelve loco.
Su pureza es impaciencia,
El pecado original.
Estoy hablando de Adán.
A ese niño
Con cuerpo de hombre
Que nadie intente destruir
Su integridad.
Estoy hablando de Adán.
Estoy hablando de Adán.
Estoy hablando de Adán.
Estoy hablando de... Adán.