Fiesta Sin Madame Rutina


Dicen que se acerca el fin del mundo, pues si viene nos lo vamos a cargar,
vamos a pegarnos la gran fiesta, de esas que nunca deberían acabar.

Que la rutina te apalanca y te domina y te enrobina como al hierro, el agua,
te entumece y amorriña cosa fina, y ese aburrimiento se empalaga,
la rutina es monótona y cretina, y te absorbe como al río la mar,
hay rumores que se acuesta con la ruina y se levanta en misa frente al altar.

Vamos a pegarnos la gran fiesta de esas que nunca deberían acabar,
ven a disfrutar y que disfruten también contigo todas las demás.

Madame rutina no genera adrenalina (¡anda, rima con ina!)
y se enfarina con el vaho que se condensa, tanto mirar tras el cristal de su ventana.
Madame rutina te desplaza fuera del camino (¡eh, sin empujar!),
Madame rutina no te deja ni andar, es licenciada en artes de inmovilidad.

Experta en técnicas "mirad y callar", máster en ciencias de la pasividad,
todo un elenco de títulos que justifican su doctrina... Por eso
vamos a pegarnos la gran fiesta, de esas que nunca deberían acabar,
dicen que se acerca el fin del mundo, pues si viene nos lo vamos a cargar.

Vamos a pegarnos la gran fiesta, de esas que nunca deberían acabar,
pero a esta fiesta Madame rutina no puede entrar, no puede entrar, no no no puede entrar.